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Cómo ayudar a tu hijo a desarrollar una autoestima saludable

Ya todos sabemos que la autoestima es el aprecio o consideración que uno tiene de sí mismo. Cuando tenemos una baja autoestima aumenta nuestra ansiedad, estrés, soledad, y podemos tener problemas de depresión o temor a las interacciones sociales. De allí que es importante fomentar en nuestros hijos una autoestima robusta, para que puedan desenvolverse en la vida con confianza.

Éste fue un tema significativo para mí cuando estaba criando a mis hijos, que hoy ya son profesionales independientes. Por eso, sabiendo la importancia de criar hijos con alta autoestima, acá te dejo algunas ideas para tener en cuenta:

Apoyá las conductas positivas y corregí las conductas negativas: Cuando observás las cosas que tu hijo hace bien y lo felicitás por su logro o esfuerzo, él se siente validado y apreciado, motivándose así a repetir esas conductas. Cuando hace algo que no está bien y lo corregís, es importante destacar que lo criticable es la conducta, no él. Si trajo una mala nota de la escuela, es la calificación la que no es buena, pero no hay que decirle “no sos inteligente, sos un burro, sos bruto, etc.”.
Cuando estaba en el secundario – high school -, yo tenía alumnos de primaria para apoyo escolar. Una de mis alumnas era una vecinita de 7 años que estaba en 2do grado y tenía dificultades en la escuela, y un día le pregunté por qué no había completado los deberes, y me contestó porque el papá le decía que era burra. Me dolió tanto a mí que todavía lo recuerdo. Como puede crecer con confianza y autoestima esa niña si en la casa le repiten que es burra y que por eso no aprende.

No compares a tu hijo con nadie: Cada niño tiene sus talentos propios, su personalidad y es injusto pretender que perciba el mundo como lo hace su hermana o su primo. Las comparaciones son siempre molestas y no ayudan a fortalecer la autoestima. Cada uno tiene que ser celebrado por sus propios méritos, y cuando hay algo que corregir, que no sea basado en la comparación con otro.

Fomentá la independencia: nuestra función como padres es criar hijos independientes, que el día de mañana puedan manejarse, pensar y prosperar por sus propios medios. Por eso, desde niños es esencial comenzar a fomentar su habilidad de tomar decisiones, de cumplir con mandados y ciertas responsabilidades acorde a su edad. Esto les dará la confianza de tomar más desafíos, defender sus opiniones y hacer nuevos amigos a medida que crecen.

Promové que tenga pequeños retos progresivos: a medida que va superando desafíos, se le pueden agregar otros mediante los cuales adquiere nuevas capacidades. Aunque es tentador para nosotros como padres facilitarles todo, reconozcamos que allí no hay ningún reto para ellos y por consiguiente no tienen nada que aprender de esa experiencia. Superar obstáculos los hace creativos y los fortalece.

Hacé que sus recaídas sean una oportunidad de aprendizaje: todo el que intenta hacer cosas en algún momento fracasa. Les ocurre a deportistas, artistas, empresarios y a todos los que alguna vez aprendimos a caminar y a andar en bicicleta después de varios golpes. Cuando los padres tomamos esa traspié como una ocasión para que el niño aprenda de esa experiencia, estamos sentando las bases para que cuando las cosas no le salgan como quería, aprenda a levantarse y a analizar qué podría haber hecho diferente para tener un mejor resultado. El fracaso va a llegar, ¡y en buena hora!, porque es un gran maestro.

Dale tiempo de interacción: una de las maneras en la que los niños miden el amor de sus padres es por el tiempo que les dedican. Cuando sienten que sus padres no están disponibles para ellos, se sienten poco importantes y solos, lo cual contribuye a debilitar su autoestima.

Estimulá su imaginación y alentalos a que exhiban su trabajo: Cuando los niños crean algo, pintan, dibujan, y esos trabajos luego se lucen en la casa o en la escuela, ellos se sienten apreciados e importantes.

Trabajá en tu propia autoestima: como sabemos, los niños copian los comportamientos de los que lo rodean, en particular de sus padres. Si mamá tiene baja autoestima, por ejemplo, el hijo o hija va a reproducir esa conducta. Por eso, es importante que nosotros busquemos de fortalecer nuestra propia autoestima para que nuestros hijos emulen nuestra confianza, serenidad, sociabilidad.

Una autoestima elevada afecta favorablemente a todas las áreas de la vida, y como padres tenemos la responsabilidad de plantar esa semilla en nuestros hijos desde niños para que el día de mañana se conviertan en adultos que tienen confianza en sí mismos, que se ocupan de su salud física y emocional, que pueden afrontar problemas y asumir responsabilidades.

Sandra Camponogara
Sandra Camponogara
Sandra emigró a los Estados Unidos en 1988 desde su Argentina natal con grandes sueños y sin ahorros. Después de trabajar en la industria del turismo en la ciudad de Nueva York durante unos años, comenzó su propia compañía de operadores turísticos, InterConnect USA en 2000 y dos décadas más tarde creó su segunda compañía, Hola Fortuna. Reinventándose una y otra vez a través de desafíos comerciales y personales, Sandra alienta a las latinas a buscar el equilibrio y la independencia financiera.

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