Si hay algo de lo que podemos estar seguros es de que los cambios son parte de la vida de modo que es saludable empezar a amigarnos con esa realidad. Pero cada tanto, la vida nos trae cambios que son grandes, fuertes y que generan gran estrés para todos, en particular para los niños.
Nuevas experiencias como divorcio, mudanza, comenzar clases en una escuela nueva o tener un hermanito pueden hacer que nuestros hijos sientan temor o ansiedad. Ayudarlos a manejar estos cambios con estructura, estabilidad y amor les enseñará a salir de esa experiencia fortalecidos. Los niños necesitan de la ayuda de sus padres para entender sus sentimientos, ajustarse a los cambios y aprender nuevas estrategias que les servirán de por vida.
¿Cómo podemos entonces ayudar a nuestros hijos a enfrentar esos cambios inevitables?
Dales tiempo para que se preparen: a veces no hay oportunidad de prepararlos con anticipación, como en el caso del fallecimiento repentino de un ser querido, pero mientras sea posible advertirles que se viene un cambio les da tiempo de procesarlo y comenzar a aceptarlo. Además, te da tiempo de familiarizar a tu hijo con lo que no le resulta familiar. Si se trata de un divorcio, llevalo a conocer donde va a vivir el padre que se muda de la casa. Mostrales cual cuarto será el de ellos y dale un paseo por el vecindario.
Si el cambio es una mudanza, llevalo por anticipado a que conozca la casa donde van a vivir y su nueva escuela. Pedí una cita para que tu hijo conozca a su maestra por anticipado y que esta le cuente cómo es un día típico en su clase y le muestre fotos o trabajos de otros alumnos.
Si la mudanza es de un país de habla hispana a Estados Unidos, el niño tendrá que enfrentar además el tema del idioma. Es importante ser sensible a que sus compañeros le puedan hacer burla porque no habla bien el inglés y que quizás comience a rechazar su idioma materno para sentir que pertenece al grupo.
Si el cambio es la llegada de un bebé, mostrale fotos de cuando tu hijo era bebé. Hablale de qué esperar cuando el bebé llegue y las muchas maneras en las que será buen hermano o hermana mayor.
Leé libros sobre los grandes cambios en la vida: Hay muy buenos libros en español para ayudar a los niños a sobrellevar los grandes cambios de la vida como mudanza, divorcio, cambio de país, crianza de hijos bilingües, duelo. Te dejo al final del artículo una buena selección para que elijas.
Cuando apoyamos la transición con una buena lectura, facilita la conversación con nuestros hijos y ellos también se sienten acompañados.
Validar como se sienten tus hijos: aún cuando tratemos de enfocarnos en lo positivo, es necesario validar y valorar como se siente tu hijo. Es importante que sientan lo que tienen que sentir y acompañarlos en ese proceso. A veces puede que tu niño no tenga las palabras adecuadas para expresar su sentimiento, y podes ayudarlo a nombrarlas como ‘estoy triste, preocupado, ansioso, asustado’. Y con frecuencia, lo mejor es darles seguridad de que todo estará bien al final como ‘mudarse a otro lugar a veces nos pone tristes y nos da un poco de miedo y es normal sentirse asi. Respiremos hondo los dos juntos. Vamos a estar bien’.
Dales estabilidad a traves de una rutina: con los grandes cambios, el tener consistencia y estabilidad es importante. Mantenete en lo posible en la rutina diaria, muy especialmente en horas de comidas y de irse a dormir y no provoques cambios innecesarios en este momento. Por ejemplo, si se mudan a otro lugar y eso implica cambio de localidad y escuela, no lo anotes además en clases opcionales de piano hasta que no se sienta mas cómodo con su nuevo entorno. Descansar lo suficiente y alimentarse con comidas nutritivas ayuda a sobrellevar situaciones de estrés tanto para los hijos como para los padres.
Conectate, jugá y ofrecele opciones: ningún cambio por el que te toque atravesar debiera modificar la conexión que tenes con tu hijo. Tiene que saber sin lugar a dudas, que no importa que es lo que se modifica en su vida, vos vas a estar allí para cuidarlo y apoyarlo. Aun cuando vos también estas pasando por el estrés del cambio, es vital que te tomes un momento diario para darle toda tu atención a tu hijo, jugar juntos y ofrecerle opciones donde sienta que tiene algún nivel de decisión, por ejemplo, dejarlo elegir que color quiere pintar su cuarto, o que ropa quiere usar para su primer día de clases o donde le gustaría poner la camita del perro.
Hablale de cambios superados: recordale que otros cambios ya han pasado en su vida y como todo ha seguido su curso. Quizás haya pasado ya por empezar la escuela, la llegada de una mascota, empezar clases de natación y despedir a un amiguito que se mudo a otro lugar. Evalúen juntos lo que aprendió de esas experiencias, que le gusto y que no.
Como adultos, también nosotros sentimos la ansiedad ante los cambios, pero recordemos que nuestros hijos tienen antenas super avanzadas y captan nuestras emociones. Cuidarnos nosotros es importante por la salud física y mental de ambos. Yo recuerdo que en el 2004 después de una mudanza importante, cambios de escuela para mis hijos, y un nivel de estrés colosal en mi negocio, terminé en el hospital con un ataque de pánico. ¿Saben a quien pude ayudar estando en ese estado? ¡A nadie! Entonces el estar bien nosotros, es esencial para ser el sostén emocional de estas personitas que tanto amamos.
No te vayas sin dejarme tu comentario y revisar la lista de libros sugeridos, que te pueden ayudar en épocas de cambios.
Leer ayuda mucho en estos procesos, por eso te recomiendo los siguientes libros:
No Es Tu Culpa, Koko Oso: https://amzn.to/3kfNBbE
Nina tiene dos hogares: https://amzn.to/3tO5rpj
¡Yo Puedo!: (I Got This!) https://amzn.to/2VSkTnS
Nos vamos a vivir a otro país https://amzn.to/3hFkKMk
Lucía y el nuevo país https://amzn.to/3nJQZ0I
El hilo invisible https://amzn.to/3tQK0nJ
Cómo criar niños bilingües: https://amzn.to/3tBwSki
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