La decisión familiar de otorgar una paga a los niños y jóvenes, es un tema muy debatido. Por un lado es una oportunidad para que aprendan a administrar su propio dinero y por otra parte, si se les paga sin ningún requerimiento de trabajo, van a crecer pensando que el dinero simplemente llega. Entonces, ¿Qué deben hacer los padres? La respuesta es ‘depende’.
No hay una manera única y correcta de pagarle a los niños. Depende de los intereses del chico, su edad, la situación financiera de la familia y tus preferencias personales.
Hay dos escuelas de pensamiento en lo que se refiere a la paga para niños y adolescentes:
1. Paga basada en quehaceres realizados:
La idea es simple: el chico completa una tarea y recibe paga. No hace los quehaceres, no hay chavos. Esto tiene de positivo que el niño aprende desde temprana edad que tiene que ganarse el dinero. Les ayuda a comprender que las decisiones tienen consecuencias. Este enfoque tiene también sus contras. Por ejemplo, les enseña que no tienen que hacer tareas, sino que los quehaceres son una opción. También se puede percibir como que se recompensa al niño por hacer lo que debiera hacer de cualquier manera: hacer su cama, recoger su plato de la mesa y levantar los juguetes, por ejemplo. Esto lleva al tema de qué actividades son las que pagamos: ¿Le pagamos porque ponga sus medias en el lavadero? ¿Porque le de agua al perro? El tema es qué hacer cuando contestan ‘lo hago si me pagás’ o cuando no necesitan dinero esa semana entonces no hacen nada. Pienso que este enfoque es un poco difícil de implementar, salvo que se establezcan claramente cuales son las actividades por las que se paga.
2. Paga sin conexión a quehaceres:
Los chicos reciben una paga todas las semanas, independientemente de su comportamiento. Además, se espera que ayuden en la casa porque son parte de la familia. No hay vínculo entre trabajo y paga. Esto les enseña que se espera que hagan quehaceres por ser integrantes de la familia y porque es también su responsabilidad, no porque van a ser recompensados financieramente. Los críticos dicen que los chicos en este grupo se sienten que tienen derechos y no van a aprender el valor del trabajo.
3. Híbrido:
Se le da al chico un monto fijo por semana que no esta ligado a ningún trabajo. Se le aclara que tiene que cumplir con ciertos quehaceres por ser parte de la familia. Si quieren dinero adicional, pueden hacer otros trabajos en la casa diferentes de los quehaceres regulares, como por ejemplo lavar el auto, lustrar zapatos, darle un baño al perro, etc. Este método tiene una estructura mas fácil de implementar.
Cuando se empieza con un sistema de paga, es importante ser claro con los chicos y establecer expectativas. Tal como lo hice con mis hijos, creo que es importante decirles que como ya están más grandes, van a recibir una paga semanal de determinada suma de dinero (por ejemplo, $6) y enseñarles a que lo dividan en 3 alcancías: Ahorrar, Gastar y Compartir.
Hay ciertas reglas a tener en consideración cuando se da una paga, independientemente del método elegido:
Cantidad: depende de la situacion financiera de la familia, pero una guía aceptada es $1 semanales por cada año de edad. Por ejemplo, tu hijo de 6 años recibirá $6 por semana y tu hija de 9 años recibirá $9 por semana.
Ser consistentes: si el día de pago es los viernes, te tenés que asegurar que ese día le das el dinero. Tiene que ser en efectivo, billete y monedas, para que lo sientan físicamente. Esto también les ayuda a verlo crecer en la alcancía.
Establecer limites: tiene que quedar claro el tipo de cosas por las que los padres van a pagar y cuales el niño tiene que comprar con su dinero.
Que sea una experiencia positiva: la paga no tiene que ser usada como castigo. Si tu hijo no se portó bien esa semana, no le suspendas el pago. Esta es su primera experiencia manejando dinero y no querés causarle ansiedad. Siempre se puede corregir un mal comportamiento quitándole otros privilegios o juegos, pero no su paga.
Ayudalos a llevar las cuentas: para los niños es difícil saber cuanto dinero tienen disponible para gastar y cuanto necesitan. Aquí te dejo un gráfico divertido que podes imprimir para ayudar a tu hijo a saber cuanto tiene y cuanto le falta para comprar lo que quiere.
Dejalos que se enfrenten a problemas: si malgastan el dinero, tienen que aprender que hay consecuencias. Cuando gasten todo lo ahorrado en helado y después quieran comprar un juego nuevo que salió y no tengan el dinero, van a aprender cuales son las prioridades. Si corremos a comprarles el juego porque se quedaron sin dinero, es una oportunidad desperdiciada. Y lo mismo con otras tareas: ¿se olvidaron los deberes? Hay consecuencias en la escuela. ¿No practican piano? Que le expliquen a la maestra. ¿Se les pasó la fecha para pagar por el Yearbook de la escuela? No hay Yearbook. Esto es mas difícil para los padres que para los chicos, pero asi aprenden, ¡y rápido!
Cuando mis hijos eran chicos, ellos no tenían paga semanal y tenían quehaceres en la casa por ser parte activa del grupo familiar. Pero les daba la oportunidad de ganar dinero con tareas extras y les daba la libertad que lo gasten como quisieran. Yo les daba algunas guías o sugerencias, pero los dejaba que gasten a su criterio. Nosotros pagábamos por sus necesidades básicas pero si querían algo diferente, estaba en ellos. Si precisaban zapatillas para la escuela, yo las compraba, pero si querían Nike Air, pagaban la diferencia. Otra fuente de ingreso para mi hijo fue una alcancía que pusimos para alentarlo a que hable español y en la que le depositábamos un dólar cada día que usara este idioma en casa. Esta herramienta resultó excelente tanto como aliciente para hablar español, como para enseñarles a administrar sus fondos.
Yo creo que es una valiosa lección el enseñarles a nuestros hijos a administrar su dinero desde temprana edad. Esto es una habilidad que les servirá por el resto de sus vidas. Y mientras antes comiencen a sentirse cómodos con el manejo del dinero, mejor. Es un gran beneficio para nuestros hijos el darles una educación financiera temprana y alguna de estas versiones de paga pueden ayudarnos con este objetivo.
¡No dejes de comentarme tu experiencia! Y si querés aprender sobre presupuesto para poder profundizar en la enseñanza financiera de tus hijos a futuro, entrá en este link.
