Si estás planeando tener hijos, te deseo mucha felicidad ya que la tarea de ser padres es un hermoso desafío. Yo he considerado siempre un honor y privilegio el poder contribuir a la formación de mis hijos, y en ese proceso, una de las cosas que me quedó muy clara, es que los niños cuestan bastante dinero en aspectos que quizás no tenemos previsto.
La mayoría de las personas anticipan que tendrán gastos en fórmula, pañales y babysitter, pero hay otras áreas financieras que también tendrán cambios. Un planeamiento adecuado usando herramientas como presupuestos, seguros de vida y robusteciendo tus ahorros te ayudará a evitar acumular deuda de bebé.
A continuación, te comento las formas más importantes en las que cambiará tu presupuesto cuando tengas hijos:
Cuidado del niño: ¡ya sea la opción de una babysitter o un establecimiento que lo cuide, los costos son altos! Tanto si ambos padres piensan seguir trabajando después del nacimiento del bebé, o que solo uno trabaje reduciendo así el ingreso familiar, es necesario tomar estos cambios en consideración cuando hacemos un presupuesto.
Seguro de Salud: la forma más económica de que el niño tenga seguro médico, es agregarlo a la póliza de la madre o del padre. La mayoría de los seguros dan 30 días desde el nacimiento para agregarlo. El aumento en la cuota del seguro y los gastos de coseguro y deducibles reduce el dinero familiar disponible.
Ahorro para la Universidad: en Estados Unidos la universidad es extremadamente costosa. En este momento, la deuda estudiantil combinada es de 1.7 trillones de dólares de modo que cuanto antes se pueda empezar a ahorrar para este propósito académico, mejor. Salir de deudas es prioritario, pero una vez que esto está resuelto, buscar planes de ahorro para la universidad como el Plan 529 debe estar en la lista de prioridades.
Seguro de Vida: una vez que comenzás una familia, es importante tener un seguro de vida. Ambos padres deberían tener un seguro de vida para cubrir los costos que se presentarán en el caso que uno de los dos falleciera. Aun si no estás trabajando, debes considerar tener un seguro de vida para mitigar los costos adicionales de cuidado de los niños.
Cambios en los impuestos: Dicen que los niños nacen con el pan bajo el brazo, y en el caso de los impuestos puede que sea cierto, ya que hay beneficios por tener hijos a cargo. Algo más a tener en cuenta, es que si trabajas en relación de dependencia debés verificar si necesitás modificar el monto que te descuentan en el pago de tu salario. Un contador o el encargado de Recursos Humanos de tu empresa te puede dar más información.
Cuenta de Gastos Flexibles (en inglés “Flexible Spending Account”): Si tu compañía ofrece este beneficio, es bueno que lo aproveches especialmente ahora que tenés una persona más en el grupo familiar. Esta cuenta te permite utilizar, para determinadas categorías, una cierta cantidad de dinero libre de impuestos. Podes usarla, por ejemplo, para gastos médicos o de dentista entre otros.
Cambios de Vivienda: los niños requieren mayor espacio. Lo ideal es calcular antes que lleguen los hijos cuales son los costos adicionales vinculados a tener un niño y determinar así cuánto dinero tendremos disponible para comprar o alquilar una casa. Una vez que los chicos están en edad escolar, es bueno mudarse a un barrio con buen distrito escolar, lo cual generalmente implica que será una zona más cara. Cuando mis hijos estaban terminando la primaria, nosotros decidimos vender la casa donde vivíamos y mudarnos a un barrio con excelente distrito escolar. Fue un cambio importante, pero visto en retrospectiva, fue una de las mejores decisiones. Mis hijos fueron a escuelas públicas y tuvieron la oportunidad de ir a excelentes universidades. La educación pública en un buen distrito escolar les puede otorgar muy buenas bases. Como alternativa, se encuentran las escuelas privadas, que suelen ser muy costosas y en muchos casos amerita considerar una mudanza.
Cambios en tu presupuesto: tu presupuesto va a cambiar bastante considerando los gastos de comida para bebé, formula, pañales, de modo que es necesario planear por anticipado. Otras categorías que van a necesitar más recursos son ropa y entretenimiento, gastos educacionales como tutores, participación en deportes y clases de música. Por otra parte, las vacaciones también vendrán con un costo mayor ya que hay que comprar pasajes aéreos adicionales, habitaciones de hotel más grandes, más comida en restaurants, etc. Lo importante aquí es tener en cuenta que estos gastos van a llegar, algunos inmediatamente después del nacimiento, otros algo más adelante, pero en la medida que estemos preparados y no nos tomen de sorpresa, no serán problema. Y mientras antes podamos comenzar a trabajar en nuestro presupuesto, ahorrar e invertir, todo será mucho más fácil.
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